El sol es la base de la vida y nos proporciona vitamina D, sin la que no podemos vivir. Pero aunque sea muy saludable y necesario para nuestra vida, también puede ser el peor enemigo de tu piel. Aunque las quemaduras solares pueden aumentar el riesgo de cáncer de piel, tener una piel seca y curtida, manchas oscuras y arrugas, pasar un día soleado en la playa no es lo único que te puede causar problemas. Cada vez que te expongas al sol sin protección solar, el daño cutáneo aumenta. Y eso sucede en cualquier momento del año.
Todos nacemos con afecciones cutáneas de algún tipo, como marcas de nacimiento o pecas. Unas personas más que otras, pero a medida que envejecemos todos podemos desarrollar lunares, estrías, cicatrices y pigmentación de la piel. Además, la exposición continuada a la radiación UV puede provocar que las células se vuelvan cancerígenas. Aunque puede afectar a cualquiera, las personas de piel sensible, pelo claro y ojos azules o verdes tienen mayor tendencia a las quemaduras solares y a sufrir daños en la piel de forma repetida.
Hemos elaborado una lista de trucos y consejos sobre las afecciones cutáneas más comunes, que te ayudará a saber cómo protegerte.
#1 Marcas de nacimiento y lunares: Por todo el cuerpo puedes encontrar marcas de nacimiento o lunares. Son básicamente lo mismo, pero la principal diferencia es que las marcas de nacimiento están presentes al nacer y los lunares salen con el paso del tiempo. La mayoría de los lunares no son peligrosos ni cancerígenos, y los hay de muchas formas y tamaños: marrones, negros, peludos, con relieve, grandes, pequeños… Pero, al igual que el resto de la piel, es muy importante proteger los lunares y las marcas de nacimiento, ya que la exposición prolongada a los rayos UVA y UVB puede dañarlos y provocar cáncer de piel.
La protección solar de amplio espectro, como P20 SENSITIVE SKIN, te proporciona una triple protección los 365 días del año.
#2 Pecas: Si tienes pecas, te habrás dado cuenta de que siempre que sale el sol, tus pecas se ven mucho más. Estas pequeñas manchas oscuras son células de la piel que han producido pigmentación adicional y se activan con la exposición al sol. Por lo general, las personas con el gen de las pecas (MC1R) tienen la piel pálida, aunque cualquier ser humano, independientemente del color de su piel, puede nacer con pecas.
Las pecas tienen un cometido, ya que, en cierto modo, actúan como filtros solares y bloquean de forma natural los rayos UV para que no penetren en las capas más profundas de la piel. Pero no te engañes: si tienes pecas, los rayos UVA y UVB pueden seguir dañando tu piel y debes utilizar protección solar. A algunas personas no les molestan sus pecas, pero otras prefieren que se noten lo menos posible, sobre todo en la cara, por el tono irregular que proporcionan a su piel.
Una forma estupenda de proteger tus pecas es con P20 SENSITIVE FACE SPF 50+, que te proporciona una crema solar de amplio espectro para todo el día, formulada específicamente para proteger el rostro y el cuello de los daños cutáneos de los rayos UV.
#3 Despigmentación y manchas por el sol: Pueden aparecer debido a cambios hormonales, como el embarazo o el envejecimiento, pero en general la exposición prolongada al sol acelera la producción de melanina (el pigmento responsable del color de la piel) y provoca manchas solares. La mayoría de la gente quiere prevenir su aparición durante el verano. Si tú también quieres evitarlas, debes poner en práctica las técnicas de protección adecuadas y la protección solar es, obviamente, de gran importancia. Exponer la piel al sol, broncearse o quemarse provocará, sin duda, despigmentación de la piel o manchas solares. Si quieres evitarlo, debes usar protección solar todos los días y aplicarla de forma generosa y constante.
Recomendamos aplicar, como mínimo, una dosis generosa de P20 SENSITIVE FACE SPF 50+ en el rostro. Si el cuello, el pecho, los brazos y las piernas también están expuestos, también deberás aplicar P20 en esas zonas.
#4 Estrías : Existe la idea errónea de que el sol puede reducir las estrías. Es falso. Las estrías son el resultado del ensanchamiento rápido de la piel para hacer sitio al peso extra, como en el caso del crecimiento repentino, el embarazo y los aumentos y pérdidas rápidos de peso. No se pueden prevenir y no hay ninguna forma segura de hacer que desaparezcan. La mejor forma de disimularlas es utilizar protección solar, ya que tienden a cambiar de un rojo intenso a un color más suave protegiendo la piel de los daños del sol. Por el contrario, los rayos del sol pueden debilitar la piel y empeorar el aspecto de las estrías.
El protector solar P20 ORIGINAL SPF 30 o 50+ proporciona una formulación transparente de secado rápido y resistente al sudor que protegerá tus estrías.
#5 Cicatrices: Muchas personas no se dan cuenta de que el tejido cicatricial puede tardar hasta 18-24 meses en curarse, el mismo tiempo que puede tardar en desaparecer el color rosa o rojo de una cicatriz reciente. Si expones demasiado tu cicatriz a los rayos UV, se producirá una hiperpigmentación posinflamatoria, que puede hacer que la cicatriz pase del rosa al marrón. Y puede durar años.
La forma más obvia de proteger las cicatrices del sol es taparlas, aunque si utilizas los productos P20, que ofrecen protección UVA y UVB de amplio espectro, conseguirás la mejor protección para tus cicatrices. Incluso en los días nublados.
Entonces, ¿cómo se puede controlar el nivel diario de rayos UVA y UVB? Accede al Índice UV, una herramienta desarrollada por la OMS para determinar la cantidad de radiación UV que nos rodea. Para identificar el índice diario, existen diversas aplicaciones meteorológicas que pueden orientarte sobre qué precauciones tomar contra la radiación UV. Analicemos el índice:
- Índice 0-2: Riesgo bajo y protección necesaria. Si te quemas con facilidad, cúbrete y utiliza un protector solar de amplio espectro. Utiliza gafas de sol en los días soleados. Los rayos UVA están presentes incluso cuando el índice UV es bajo: recuerda utilizar una protección solar que incluya protección UVA.
- Índice 3-5: Riesgo moderado y protección necesaria. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. Permanece a la sombra durante el mediodía, cuando el sol es más fuerte. Cuando estés al aire libre, utiliza un sombrero de ala ancha y gafas de sol con filtro UV.
- Índice 6-7: Riesgo alto y protección necesaria. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. No te expongas al sol entre las 11:00 y las 15:00. Cuando estés al aire libre, busca un lugar con sombra, lleva ropa protectora, un sombrero de ala ancha y gafas de sol que bloqueen los rayos UV.
- Índice 8-10: Riesgo muy alto y protección esencial. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. No te expongas al sol entre las 11:00 y las 15:00. Cuando estés al aire libre, busca un lugar con sombra, lleva ropa protectora, un sombrero de ala ancha y gafas de sol que bloqueen los rayos UV.
- Índice 11+: Riesgo extremo y protección esencial. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. No te expongas al sol entre las 11:00 y las 15:00. Cuando estés al aire libre, busca un lugar con sombra, lleva ropa protectora, un sombrero de ala ancha y gafas de sol que bloqueen los rayos UV.
El índice UV cambia a lo largo del día y suele ser más intenso durante el mediodía. Pero es importante tener en cuenta que los rayos UV están siempre presentes, por lo que te recomendamos encarecidamente que uses protección solar P20 todos los días, durante todo el año.