¡Disfruta del momento!
¿A quién no le gusta escaparse del calor, darse un agradable baño, un relajante paseo en barco, salir a correr o entrenar al aire libre, o simplemente pasar un día en la playa?
Pasar tiempo al aire libre es muy rejuvenecedor, pero es importante proteger la piel del sol y, sobre todo, de los elementos reflectantes, que aumentan la exposición al sol. Hay muchas oportunidades de quemarse: la exposición prolongada al sol, la sudoración y el tiempo que se pasa en el agua o en la nieve. Al igual que nos preparamos de forma adecuada para un partido de fútbol, con zapatillas, espinilleras y una estrategia de equipo, es fundamental aplicar protección solar tantas veces como sea necesario.
Hay muchos factores que pueden contribuir a que se produzca una quemadura solar dolorosa durante las actividades al aire libre. La altitud, el nivel del mar y los reflejos de determinadas superficies son algunos de los factores que pueden dañar la piel. Por eso hemos creado esta guía de protección solar para actividades al aire libre, para que puedas disfrutar de las actividades que más te gustan sin preocuparte por las quemaduras solares y los daños en la piel.
Deportes acuáticos :
No hay nada mejor para recuperar al niño que llevamos dentro que un día de actividad en el agua. No importa si lo que te gusta es subirte a una tabla de surf, nadar o simplemente pasar el día en la playa o en la piscina, siempre debes tener especial cuidado a la hora de protegerte del sol. El agua aumenta la cantidad de rayos UV, ya que refleja los rayos solares. Además, el efecto refrescante del agua te hace pensar que no te estás quemando. ¡Y eso es un cóctel muy peligroso! Como siempre, la protección solar es tu mejor compañera y debe aplicarse una protección de factor alto, amplio espectro y resistente al agua al menos 20 minutos antes de salir a disfrutar del día junto al agua. Y no te olvides de aplicar de nuevo la protección solar a medida que pasen las horas.
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Deportes de invierno:
Una mayor altitud aumenta el riesgo de sufrir daños solares, ya que la exposición a los rayos UV aumenta aproximadamente un 5 % por cada 300 metros por encima del nivel del mar. Es decir, una altitud de 3000 m sobre el nivel del mar puede producir una radiación hasta un 45 % más fuerte. Además, la nieve actúa como superficie reflectante, haciendo rebotar los rayos UV del sol hacia ti, lo que supone una doble dosis de exposición.
La única solución es aplicar un protector solar de amplio espectro y factor elevado. Asegúrate de cubrir todas las zonas, incluso las fosas nasales, ya que están más expuestas al sol cuando los rayos UV se reflejan en la nieve.
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Deportes de riesgo:
En comparación con escalar un acantilado o descender a gran velocidad en bicicleta de montaña, se podría pensar que el riesgo de sufrir daños solares es insignificante. El daño solar puede ser igual de grave cuando se suda al aire libre sin protección. Te explicamos por qué. Si te gustan las actividades que requieren un esfuerzo extremo, lo más probable es que pases mucho tiempo al sol, así como a gran altitud o en el agua. Si utilizas un protector solar de amplio espectro especialmente formulado para actividades al aire libre con un FPS elevado, te permitirá limitar tu exposición a los rayos UVA y UVB.
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Deportes de competición:
El fútbol, el tenis, un maratón… cualquier deporte que se practique al aire libre requiere dedicarle mucho tiempo, tanto de entrenamiento como de competición. Y es tan importante mantenerse en forma y hacerlo lo mejor posible como protegerse del sol. Incluso en un día nublado, en el que hasta el 80 % de los rayos UV siguen irradiando sobre la piel. Hay que tomar medidas para rendir al máximo y la protección solar es una de ellas. Si utilizas un protector solar especialmente formulado, que conserve su factor de protección cuando la piel suda mucho, tu piel estará protegida mientras entrenas y compites.
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Entonces, ¿cómo se puede controlar el nivel diario de rayos UVA y UVB? Accede al Índice UV, una herramienta desarrollada por la OMS para determinar la cantidad de radiación UV que nos rodea. Para identificar el índice diario, existen diversas aplicaciones meteorológicas que pueden orientarte sobre qué precauciones tomar contra la radiación UV. Analicemos el índice:
- Índice 0-2: Riesgo bajo y protección necesaria. Si te quemas con facilidad, cúbrete y utiliza un protector solar de amplio espectro. Utiliza gafas de sol en los días soleados. Los rayos UVA están presentes incluso cuando el índice UV es bajo: recuerda utilizar una protección solar que incluya protección UVA.
- Índice 3-5: Riesgo moderado y protección necesaria. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. Permanece a la sombra durante el mediodía, cuando el sol es más fuerte. Cuando estés al aire libre, utiliza un sombrero de ala ancha y gafas de sol con filtro UV.
- Índice 6-7: Riesgo alto y protección necesaria. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. No te expongas al sol entre las 11:00 y las 15:00. Cuando estés al aire libre, busca un lugar con sombra, lleva ropa protectora, un sombrero de ala ancha y gafas de sol que bloqueen los rayos UV.
- Índice 8-10: Riesgo muy alto y protección esencial. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. No te expongas al sol entre las 11:00 y las 15:00. Cuando estés al aire libre, busca un lugar con sombra, lleva ropa protectora, un sombrero de ala ancha y gafas de sol que bloqueen los rayos UV.
- Índice 11+: Riesgo extremo y protección esencial. Aplica generosamente un protector solar de amplio espectro, incluso en días nublados y después de nadar o sudar. No te expongas al sol entre las 11:00 y las 15:00. Cuando estés al aire libre, busca un lugar con sombra, lleva ropa protectora, un sombrero de ala ancha y gafas de sol que bloqueen los rayos UV.
El índice UV cambia a lo largo del día y suele ser más intenso durante el mediodía. Pero es importante tener en cuenta que los rayos UV están siempre presentes, por lo que te recomendamos encarecidamente que uses protección solar P20 todos los días, durante todo el año.
